Quédate

Quédate a la orilla del letargo de mis ojos,
ante este océano de dudas que se rinde a tu mirada,
y déjame un suspiro transparente entre la nada
que se vuelva poco a poco en tu silencio mi condena…

Y te miraré en mi mente, recostada entre la arena,
seduciendo a los gemidos que dibujan mi garganta,
deteniendo el universo con tu dulce piel morena
mientras siento como el fuego de mis ansias se levanta…

Respiraré tu aroma, me enredaré en tu pelo,
caminare en la sombra que proyecta tu figura,
y llenaré tu cuerpo con destellos de locura
que se escapen de tus labios y me lleven hasta el cielo…

Yo,
que te he mirado en mi memoria acurrucada entre la luna
y entre mis sueños me cobijo con tus labios de esmeralda,
me arrojaría entre el abismo de tu voz inoportuna
mientras dibujo en mi dolor la mariposa de tu espalda…

Yo,
que robaría las estrellas para hacerte una diadema,
y viajaría entre las alas del infierno por tu risa,
te escribiría con la pluma de mi lengua algún poema
mientras mi aliento te envenena y suavemente te acaricia…

Quédate a la orilla del letargo de mis ojos
donde susurre tu nombre y me despierte en tu mirada
donde se esconda mi ironía entre tus tibios labios rojos
y se llenen mis recuerdos de tu luz entre la nada…

El camino hasta tu almohada

Enséñame el camino que me lleve hasta tu almohada

entre el azul-marino opaco tus alas mariposa,
y dime que hay que hacer para perderme en tu mirada
mientras me hago prisionero de tu tibia voz preciosa…

Enséñame a anidar entre tu pecho vanidosa
y déjame un suspiro entre los labios de tu boca,
revélame el secreto de tu piel que me provoca
mientras te miro flotando entre los versos de mi pluma…

Te besaré despacio, me embriagaré en tu copa,
respiraré tu aliento en la mitad de tus gemidos,
me robaré tu espacio mientras te quito la ropa
entre la noche oscura y al compás de tus latidos…

Tu cuerpo,
como un poema que desata entre la nada mi ironía,
como la luz del sol muriendo entre el paral del firmamento,
como escultura entre lo vago de mi torpe fantasía
que se desdobla ante el mural de lo que robe el pensamiento…

Tu cuerpo,
como la lluvia que se anhela en la mitad de algún desierto,
como una estrella que palpita en el jardín del infinito,
como el portal que nunca cierro y ante mis ojos queda abierto
para que juegues con mi sombra sin causar algún delito…

Enséñame el camino que me lleve hasta tu almohada
y deja que dibuje este poema en tu cadera,
y quédate desnuda entre la suave madrugada
que se vuelve ante tu imagen una fría noche entera…

Evangelio del Dinero

Acá te traigo el secreto
de la gran prosperidad,
que te da alegría, gozo, paz y pura libertad…

Déjame que te lo diga,
es la voluntad de dios,
dependiendo de tu ofrenda así podrás oír su voz…

Deja todo lo que tienes ,
de por si dios te lo dio,
una vez yo hice lo mismo
y algún dios me prosperó…

Un gran líder, un buen padre, o ser pastor es lo que quiero,
Alabado sea por siempre el dios dinero,
no seamos egoístas, que lo sepa el mundo entero,
Alabado sea por siempre el dios dinero…

Salga pronto de su asiento,
esta su oportunidad,
deposite lo que tenga con completa libertad…

No se fije en lo que tengo,
usted puede prosperar,
solo entregue diezmo, ofrenda y todo lo que pueda dar…

Deja todo lo que tienes ,
de por si dios te lo dio,
una vez yo hice lo mismo
y algún dios me prosperó…

Un gran líder, un buen padre, o ser pastor es lo que quiero,
Alabado sea por siempre el dios dinero,
no seamos egoístas, que lo sepa el mundo entero,
Alabado sea por siempre el dios dinero.

No te atrevas a dudarlo, esto es fiel y verdadero,
Alabado sea por siempre el dios dinero,
mira todo lo que tengo, he alcanzado lo que quiero,
Alabado sea por siempre el dios dinero…

Tienes que entregarlo todo, lo primero es lo primero,
Alabado sea por siempre el dios dinero,
dile no a la enfermedad, a la pobreza y a lo austero,
Alabado sea por siempre el dios dinero…

Mirándote en el pensamiento

Contemplo tu cuerpo mientras mi alma duda,
y voy con mis ojos trazando un poema
que se impregne solo entre tu piel desnuda
y se embriague de luz entre tu carne morena…

Contemplo en silencio tu voz, mi condena
e intento aferrarme en la noche a tu aliento,
me envuelve tu risa entre mi pensamiento
pero te me pierdes entre la neblina…

Y siento tu aroma, tu voz me domina,
me lleva hasta un mundo de nubes de arena
y acabo de nuevo escribiendo un poema
cargado de pétalos de adrenalina…

Inquieta,
a veces ansiosa,
queriendo a momentos volverme a encontrar,
tu risa coqueta y tu tez vanidosa
me lleva en silencio hasta el fondo del mar…

Eterna,
preciosa,
tu espalada desnuda me intenta matar
tu mirada tierna y tu cuerpo de diosa
se vuelven un fuego que no se apagar…

Contemplo tu voz acariciando al viento,
llenando el ambiente de mi fantasía,
rompiendo el silencio en tan solo un momento
y dejándome el alma confusa y vacía…

La arena de mi muerte

Ella,
la que guardaba atardeceres en la orilla de mi mente,
la que miraba hacia el vacío en la mitad de mi memoria,
la que embriagaba mi silencio con su voz en el ambiente
y me llevaba sin saberlo hasta la línea divisoria…

Era ella,
la que miraba frente al mar entre una tarde de verano,
la que dejaba entre mi cuerpo aquel aroma de ironía,
la que me hacia por momentos dibujar su cuerpo en vano
entre el ocaso de la luz y aquel sabor a sangre fría…

Y era ella,
la que pintaba con gemidos las auroras de mis besos,
la que adornaba con su pelo aquellas tardes de locura,
la que dejaba mis sentidos entre un mar de sueños presos
para morir entre los brazos de una triste noche oscura…

Eterna,
callada,
robándome el alma entre las olas del mar
tu voz mas que tierna, tu hermosa mirada
me dejan rendido sin poder hablar…

Intensa,
curiosa,
buscando poemas sin mas que decir,
tu imagen tan densa y tu cuerpo de diosa
seducen mi ser a tan solo morir…

Ella,
la que guardaba atardeceres en la orilla de mundo,
la que hoy me dice con su imagen a momentos que despierte,
con su belleza me ha dejado en el abismo mas profundo
y hoy soy un duende que la mira entre la arena de mi muerte…

Intentando existir

Ya no esta oscuro
pero aun no puedo ver
sigo siendo el inmaduro que camina en el ayer…

Cargo mis dudas
sin mirar lo que hay que hacer
me alimento de almas mudas que no quieren entender…

Sigo el camino
ya no importa donde voy
caminando hacia un destino y escondiendo lo que soy…

Y entre la nada
solo encuentro soledad
se me cansa la mirada del exceso de maldad…

Y me aferro a este vacío
de recuerdos y dolor
mientras sopla el viento frío
que desangra a mi valor….

Sentado en el limite de mi imaginación
mirando la niebla mientras hago una canción
Llenando mi mente de lo que pueda sentir
Bajando al abismo mientras intento existir…

Oigo un murmullo
en mitad de mi ansiedad
va muriéndose el orgullo entre mi furia y mi crueldad…

El tiempo pasa
y no quiero despertar
la cordura en mi fracasa y no me puedo levantar…

Y me aferro a este vacío
de recuerdos y dolor
mientras sopla el viento frío
que desangra a mi valor….

Sentado en el limite de mi imaginación
mirando la niebla mientras hago una canción
Llenando mi mente de lo que pueda sentir
Bajando al abismo mientras intento existir…

"me dejé llevar por la triste voz del viento,
donde no soy mas que el que muere en el intento…"

Bajo la Lluvia

Escucha la lluvia rompiendo el silencio
y deja tu mente tranquila y callada,
para ser como el aire corriendo en tu cuerpo
que se vuelve aliento entre la madrugada…

Escucha la lluvia en mitad de la nada
y deja tu imagen flotando en mi mente,
para acariciarte con una mirada
que muera en tu pecho por tu amor ausente…

Y envuelvo tu imagen entre mi ironía,
rozando tus labios que se vuelven viento,
flotando en los pétalos de mi fantasía
mientras te haces la dueña de mi pensamiento…

Tu rostro de niña,
tus caricias eternas,
tu piel como el mar que recorren mis manos.
me voy condenando al compás de tus piernas
ahogado en un mundo de gemidos arcanos…

Escucha la lluvia, su voz algo cruda,
mientras me enveneno de ti vanidosa,
mientras me hago esclavo de tu piel desnuda
quedando atrapado en tu cuerpo de diosa…