miércoles, 16 de diciembre de 2009

lamento nocturno

Suelo caminar entre los límites de mi fantasía,

entre las sombras opacas de un anochecer de hastíos,

donde soy un caníbal de sueños con la sangre fría

y mis recuerdos son dardos que envenenan la mente…

Y otra vez canta el viento, pero esta vez suavemente,

y desde lejos escucho un susurro gastado,

se siente el miedo correr otra vez lentamente

mientras mi cuerpo me obliga a mirar el pasado…

¿Cómo aprendí yo a ignorar los atardeceres?

¿acaso la oscuridad atrapó mi poesía?

Me enredo entre cuerdas de amor y placeres

que al final terminan en melancolía…


Y me lamento entre noches sin encontrar algún día…

He recorrido mi mundo entre cavernas astrales,

y devoré a las criaturas que alimentaban mi furia,

y entre el aliento opaco de sus catedrales

me enamoré del temor entre mi propia lujuria…

Hoy me lamento, mientras miro la luna,

mi piel ahora es fría como mi alma hueca,

mi cuerpo es tan gris como una hoja seca

y mis ojos se apagan cada vez que amanece…


Y espero en silencio, mientras mi rencor crece,

pero mi corazón inmortal ya no quiere latir,

y me dejo llevar hasta que la niebla cese

entre una noche eterna que no me deja morir…

Suelo caminar entre los límites de mi fantasía,

cosechando lamentos a la orilla del abismo,

entre los ríos de dolor y los mares de ironía,

entre los cantos de mis voces que se cargan de cinismo…

viernes, 26 de junio de 2009

Tu... entre mi melancolía


Tu cuerpo,


flotando entre los pétalos de mi fantasía,
entre una noche oscura cargada de olvido,
me lleva a un abismo de fe sin sentido
que se vuelve luz, humedad e ironía…


Y escucho tu voz entre la lejanía,
que rompe el silencio en mitad del vacío,
y embriaga mis labios con melancolía
mientras poco a poco me envenena el frío…


Tu,


que llenabas el crepúsculo de mis ojos con tu sonrisa,
que cambiabas suavemente mi tristeza por tu euforia,
me dejaste en el desierto de tu pelo entre la brisa
mientras tuve que guardar tu tibia boca en mi memoria…


Y soñaba por las noches con tus ojos de esmeralda,
con guardar entre tu pecho los susurros de mi mente,
con ser esa mariposa que anidaba entre tu espalda
y escapaba entre los rayos de tu luz en el ambiente…


Hoy,


que miro con frecuencia en el pasado,
y recorro los jardines mas profundos de la madrugada,
encuentro una rosa marchita a tu lado
mientras se nubla tu imagen en mi triste mirada…


y llora la lluvia sobre mi ventana,
mientras miro en silencio a través del cristal,
y sigo esperando por una mañana
cuando este lamento llegue a su final…


Tu cuerpo,
entre los mares de locura de mis ojos,
entre el sabor de la amargura de mi mente,
es un jardín de flores muertas y despojos
que se atormenta por tu amor eternamente…

martes, 9 de junio de 2009

Dolor

Nadie dijo que era fácil
el camino a recorrer,
porque el corazón es frágil
cuando comienza a llover...

Nadie habló de las caídas,
de lo que duele perder,
porque aún arden las heridas
que se miran en mi piel...

Soñar, es solamente una parte,
es una especie de arte,
que se escapó de mi mente...
Vivir, es parecido a un murmullo,
en cuerpo que no es tuyo
y acabará con la muerte...

Nadie habló de fantasía
ni recuerdos del ayer,
de la buena hipocresía
que nadie puede esconder...

Nadie habló de resultados
o acabar con el dolor,
para terminar ahogados
en un litro de licor...

Nadie dijo estar seguro
de lo que pueda pasar,
porque el día aún sigue oscuro
y me tengo que callar....

Ya no soy el que creían,
aquel niño luchador,
ya mi mente está podrida
de sentir tanto dolor...

domingo, 26 de abril de 2009

Melancolía

Entre los mares de lágrimas que reposan en mis letargos,
descubrí despojos de silencio que arañaban mi locura,
y navegué por mi mundo entre los ríos de amargura
hasta encontrar tu imagen rendida ante el espejo de mi memoria…


Como duele mirarte… que recuerdo sin gloria,
naufragan mis miedos entre pétalos de fantasía,
e intento entender el "¿por que?" de esta historia
mientras la culpa envenena mis venas con sangre fría…


Y escucho tu voz entre la lejanía,
como un susurro gastado entre las olas del viento,
y gritan mis miedos en mi pensamiento
hasta morir de celos por no tenerte conmigo…


Que triste tu ausencia… es todo un castigo,
me abraza y carcome mi cinco sentidos,
me llena de fe, de valor e imprudencia
pero al final regresa y amedrenta mis oídos…


¿Como pudiera alejarte del palpitar de mi destino?
¿Que acaso no entiendes que duele escribir?
mis versos son niebla al final del camino,
son solo ironía que invita a morir…


E intento alejarme de esta bruma inerte,
y después comprendo que no eras para mi,
la tarde se acaba y me ofrezco a la muerte
pero se me niega apartándose de aquí…


Dibujé el verde de tu voz entre mi prolongado desierto,
pero encontré mares de lagrimas entre los linderos de mi imaginación,
e intenté separar mi voluntad de tu puerto
pero me ahogo en las nefastas llamas de la melancolía…


Y vuelvo a lo mismo… ¿Por qué no eres mía?
¿Acaso no entiendes que sin ti soy ceniza?
me vuelvo una sombra que grita en la brisa
pero poco a poco me llena la nada…


Maldito silencio… ya es de madrugada,
me envuelven las luces de la carretera
y sigo extrañando de lo poco que me daba
mientras mi estúpida mente sin razón se aferra,


a estos mares de lágrimas y melancolía, a esta tristeza eterna…

martes, 14 de abril de 2009

Mi razon de existir

Divaga mi mente por los senderos de mi vida
y juego en silencio con atrapar la oscuridad,
y miro tu cuerpo mientras sigues ahí dormida
como un monumento que desafía a la eternidad…


Y pienso un instante en cuanto tiempo ha pasado,
cuantos versos de amor me has llevado a escribir,
cuantas guerras libradas para estar a tu lado,
cuantos tristes momentos sin saber que decir…


Recuerdas el cielo cargado de estrellas?
o un 4 de junio y la lluvia cayendo,
aquel fuego intenso aunque seguía lloviendo
mientras mi cuerpo juraba que seguiría tus huellas…


Tú,
que me enseñaste sin querer a soñar en el futuro,
que complementas hoy mi mundo con tu poca seriedad,
me has impulsado a mirar la claridad aunque esté oscuro
y hoy soy esclavo por completo de tu dulce vanidad…


Tu,
que me envenenas en los labios con tus besos suavemente,
que me acaricias los sentidos hasta verme perturbado,
dame razones que me liguen a tu amor eternamente
para anidarme entre tu pecho mientras sigo enamorado…


Deja que me cole en los murmullos de tu risa,
para acurrucarte entre mis brazos y atraparte en mi mirada,
para contemplarte en el vacío de mi mundo sin mas prisa
como luz de tenues velas entre cada madrugada…


Divaga mi mente pero te sigo anhelando,
Y aun pasan los años que me aferran a ti,
Y encuentro razones para seguirte amando,
Mi niña preciosa, mi razón de existir..

martes, 7 de abril de 2009

Sangre del alma

Noches de invierno que pasan cargadas
de furia perpetua y de lágrimas saladas,
de hojas de otoño entre sabanas mojadas
que luego en silencio se apartan de mí…


Me sangra el alma entre la mirada,
se embriaga el silencio entre la madrugada,
y queda mi mente tan quieta y callada
como un triste poema que nunca escribí…


Ya es tarde,
hace frío,
la vista se me pierde entre la neblina,
se mira la lluvia entre el callejón vacío
y el farol plantado en la misma esquina…


Luz tenue,
el alma sangrando,
tu triste recuerdo se enreda en la brisa,
mi torpe inocencia te sigue esperando
al calor de un cigarro que se vuelve ceniza…


Y sigo sentado en la misma ventana,
mirando el recuerdo que dejaste perdido,
buscando alcanzar en tu ausencia un mañana,
sin mucho que hablar pero aun confundido…


Sigo escribiendo entre noches de invierno,
sigo nadando entre lágrimas saladas,
y es que tu ausencia es como un infierno,
como un racimo de puñaladas…

Esclavo de la Oscuridad

Mi mundo nadando en un mar de cinismo,
mi cuerpo atrapado entre la oscuridad,
me quedo en silencio en mitad del abismo
y escucho el susurro de la soledad…


Que poca conciencia,
me quiero apartar,
se acaba en mi mente la triste inocencia
y quedo enterrado queriendo escapar…


Y escucho murmullos flotando en el viento,
y miro a lo lejos el templo olvidado,
y corre la furia de un gnomo en mi aliento,
como un moribundo mirando el pasado...


…Que triste ironía!
No encuentro cordura,
me muero en silencio mientras mi alma se agita,
mi espíritu escucha un lamento que grita
y quedo rendido ante la noche oscura….


Me canse de ser mortal,
y mirar con dolor hacia el ocaso,
me canse de esperar un destino fatal
que me empujara hacia un mar de locura y el fracaso…


Y me escondí durante el día de la claridad,
hasta que aprendí a recorrer los senderos del destino,
se acostumbraron mis ojos a la oscuridad
y conseguí devorar a quien se puso en mi camino…


Me convertí en una especie de criatura,
en un maestro del placer y del dolor,
y convertí todo mi mundo en una dictadura,
donde quedó un triste vacío de cenizas de valor…


Mi mundo nadando en mar de cinismo,
me ahogo en mi sangre por la eternidad,
y anhelo volver pero ya no es lo mismo
soy solo un esclavo de la oscuridad…

martes, 3 de febrero de 2009

Envenéname

Envenéname los versos con lo frágil de tu aliento,
con los susurros del tiempo envenéname querida,
que me lleven a tus brazos cuando aún estés dormida
y se metan libremente entre cada pensamiento…


Envenéname la vida, con el calor de tu cuerpo,
con el roce de tu pecho suavemente sobre el mío,
y el sonido de tus ansias respirando en el vacío
envenéname de nuevo, hasta llegar al hastío…


Y correrán mis manos entre tu piel desnuda,
como se que escapa la arena del agua salada,
como un poema entre el lápiz de Pablo Neruda
que se envenena en silencio entre la madrugada…


Y se entregarán mis labios al sabor de tus besos,
y recorrerán tu cadera entre una luz que se escapa,
como las notas mas dulces de una melodía opaca
que me envenena el alma y la piel sin sentido …


Y jugaré entre tu vientre, donde me tienes cautivo,
donde mis labios se embriagan con el sabor de ti risa,
donde tu pelo se enreda jugando en la brisa
y las estrellas te miran desde el infinito…


Envenéname los versos que rellenan mi poesía,
para llevar hasta el abismo de tus ojos mis cordura,
para sentir como calientas en silencio mi alma fría,
para escapar entre tus besos de esta triste noche oscura…

viernes, 9 de enero de 2009

Sentado

Sentado…
Entre el sabor a alquitrán,
a ceniza y brea,
esperando en silencio junto a la chimenea
me dejo llevar por mi pensamiento…


Se escucha a lo lejos los gemidos del viento
mientras poco a poco me quedo dormido…


Y extraño tus besos,
me siento perdido,
me llena el vacío de tu vago recuerdo,
del perfume añejo que dejaba tu cuerpo
cada vez que llenabas mi cama muñeca…


Hoy miro al pasado, mi mente se seca,
susurro tu nombre entre la madrugada,
me vuelvo un cautivo con el alma hueca
que muere a pedazos por una mirada…


E intento olvidarte
pero no lo consigo,
me aferro a lo dulce de aquellos momentos,
anhelo tu aroma pero no lo percibo
y acabo enterrado entre un mar de lamentos…


Y sigo sentado,
extraño tus besos,
me siento acabado en un mar silencio,
y vuelvo de necio a mirar al pasado
mientras poco a poco me entrego al vacío…
y tu ya te has ido… y espero sentado…